La IA en Cinco, Cincuenta y Quinientos años- Segunda Parte- Cincuenta Años
Echa un vistazo a la primera parte de esta serie para ver cómo serán los próximos cinco a quince años en lo que respecta a la Inteligencia…
Echa un vistazo a la primera parte de esta serie para ver cómo serán los próximos cinco a quince años en lo que respecta a la Inteligencia Artificial. En esta segunda parte abordaremos la ciencia ficción y descubriremos si nuestra bola de cristal puede alcanzar los 50 años en el futuro.
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“Cualquier tecnología suficientemente avanzada es indistinguible de la magia.”
- Arthur C Clark
Bienvenido a 2069.
La inteligencia infunde todos los aspectos de nuestra vida cotidiana
Una vez que los objetos mudos se hayan despertado. Tu camisa estará balbuceando con tus sombras y conversando con los pendientes de perlas de tu novia cuando viajas para dar una charla en Brasil.
Todo lo relacionado con nuestras casas, armas, aviones, trenes y automóviles, carreteras, ropa, joyas, audífonos, gafas y lentillas estará lleno de pensamientos.
Los nuevos algoritmos dinámicos que nos han empujado más allá del aprendizaje profundo y han potenciado la cuarta ola de la revolución de la inteligencia han surgido de los esfuerzos mundiales para mapear cada neurona y conexión en el cerebro humano. Con el tiempo, los procesadores y la biotecnología alcanzarán nuestras ambiciones y los científicos resultarán victoriosos yendo más allá de nuestras expectativas.
Al igual que el proyecto del genoma humano anterior, la carrera de mapeo cerebral en todo el mundo tomará décadas y tendrá un coste de millones de dolares. Pero los avances lograron que el precio bajara dramáticamente y unas décadas más tarde, podrías mapear la mente humana para una fracción de la moneda de reserva mundial Bitcoin y respaldarla al almacenamiento distribuido y descentralizado que se ejecuta en foglets .
Se volvió tan barato que todos, desde el personal local a los CEO más poderosos de la Tierra, comenzaron a tomar instantáneas / respaldar su mente en diferentes etapas de su vida con la esperanza de ser recreados más tarde con clones o virtualmente.
¿Qué tenía que ver el neuromapping con la IA?
Los científicos de datos no descubrieron los secretos algoritmos de aprendizaje universal en el corazón de la mente humana, pero pudieron observarlos en tiempo real mientras las simulaciones cerebrales se ejecutaban en los neurochips inspirados en los proyectos.
No descubrimos cómo aprender. Hackeamos el aprendizaje
El aprendizaje profundo, el razonamiento simbólico y los algoritmos genéticos parecían primitivos en comparación con los sistemas de aprendizaje rápido de los años 2040 a los años 2060.
Los fabricantes de ASIC de criptomoneda fuera de China fueron los primeros en construir los nuevos chips radicales que cambiaron la manera en que procesamos la inteligencia, llevando sus habilidades de fabricación y diseño al siguiente nivel, dominando la próxima ola de computación. Los avances en la computación cuántica de la Tercera Guerra Mundial utilizados para el cifrado durante la guerra , llevaron a una quinta ola que hizo que incluso los neurochips parecieran tener poca potencia, hasta que los chips más antiguos volvieron a usar los wetware hechos de células madre que se convirtieron en neuronas artificiales.
Ahora, todo está vivo.
Nuestras vendas inteligentes controlan nuestras heridas y nos dicen cuándo debemos que cambiar el apósito o si la infección está sanando o empeorando. Pequeños parches en los vendajes reaccionan a la infección al liberar antibióticos.
Los frascos de pastillas nos recuerdan que tomemos nuestra medicina o nos advierten que no la tomemos si nos despertamos aturdidos por una noche de bebida y tratamos de tomarla dos veces.
Los camiones automáticos sin cabina para humanos corren a lo largo de la carretera a 200 millas por hora en carreteras especiales de China y los EE. UU. No son más que despojos de camas planas con ruedas, que llevan contenedores de envío inteligentes estándar. Los contenedores conocen cada objeto dentro de ellos, los objetos escaneados por nanosats y rastreados en el espacio para siempre en la web AR / IoT. Tan pronto como los platos salen de la impresora industrial 3D en la fábrica, se rastrean directamente en tu casa.
Cuando los platos se rompen piden un reemplazo ellos mismos.
Los contenedores llegan en barcos autonomos. Cuando los piratas intentan secuestrar los contenedores, los botes van a maniobras evasivas y los contenedores chirrían y piden a la guardia costera o la marina.
El pedido de la chaqueta más bonita y moderna que has comprado jamás llega a tu casa a través de drones. Cuando vas a Berghain en Berlín para bailar todo el día, tu chaqueta ajusta sus hilos a medida que la temperatura cambia o afloja los hilos a medida que se calienta. No más capas de desgaste al pasar del calor al frío en el hielo y la nieve del invierno al calor de un automóvil que se conduce solo.
Por supuesto, si estás en Berghain, simplemente te lo quitas tan pronto como entras y el sistema de control de robustez de ganchos flotantes escanea tu identificación de iris y envía un código de reclamo a tu collar de información.
Nuestros gafas, lentillas y patallas de móvil nos muestran la metainformación sobre el mundo que nos rodea, desde la información de contacto de las personas que conocemos, los detalles históricos, las advertencias de áreas de alta delincuencia que deben evitarse, hasta la ubicación de amigos y familiares que nos han dado permiso para ver dónde están durante ciertos momentos del día.
Un asistente personal de inteligencia artificial que vive en tu collar, se proyecta como un holograma y divide el tiempo entre tus audífonos y tus contactos de realidad aumentada, procesando la mitad de tus rutinas en diferentes entornos, haciendo todas aquellas actividades que hace unos años de tomaban horas. Te molesta para levantarte por la mañana, organiza reuniones, encuentra una buena botella de vino mientras vas de camino a una casa, prepara un entrenamiento increíble para ponerte en forma durante el verano, te sugiere las últimas modas y encuentra el restaurante perfecto para una cita, mientras te dice qué decir en esa fecha para ayudarte a sellar el trato con una noche de pasión.
Los niños solían tener que usar su imaginación con sus juguetes. ¿Recuerdas tus figuras de acción? Tenías que posarlas y darles voces y sagas épicas de guerra con ellos en el patio trasero.
Los niños de hoy no quieren un oso de peluche que solo se sienta con la boca abierta , mirando la pared. Los osos de peluche ahora caminan, hablan y hacen que los niños les pidan a sus padres que compren cosas. Y las figuras de acción que no corren, saltan y cargan en el patio de batalla gritando no valen nada, excepto para los coleccionistas que buscan tiempos más simples cuando el ojo de la mente tiene mucho más trabajo que hacer.
· Los juguetes solían decir “baterías no incluidas”.
· Los juguetes de hoy deberían leer “no se necesita imaginación”.
· En resumen, Toy Story cobra vida.
Los estudiantes no escriben en un diario, se confiesan con uno que responde y les da consejos sobre los problemas de tus hijos y su popularidad en la escuela.
Las bicicletas tienen detección de bamboleo y marcos extraños que se ven raros pero que fueron diseñados por máquinas para hacerlos más estables. Probablemente podrías venderlos si quisieras, pero si te cansas, la inteligencia artificial combinada con el milímetro preciso del GPS se hace cargo de ello.
Las impresoras 3D de materiales múltiples y las impresoras moleculares en las fábricas alertan a los responsables cuando se están descomponiendo y ordenan el mantenimiento. Los robots intercambian las impresoras cuando se rompen y les dan más barras de metal, madera y caucho.
Los caminos viejos son reparados por drones con cemento de rápido endurecimiento. Las carreteras inteligentes, hechas de paneles solares de vidrio industrial, muestran mensajes y permiten a la red de la ciudad saber cuándo necesitan reparaciones.
Los sistemas de extinción de incendios no solo apagan los incendios en las casas, sino que dirigen a las familias hacia dónde tienen que ir para huir, qué cuartos deben evitar y todo ello, mientras que los mantienen tranquilos con una voz suave y llaman a los camiones de bomberos autónomos.
Pero todo comenzó con coches de autoconducción.
La Autonomía y el Mundo eliz
Para el 2020, el coche autónomo va a estar presente en todo el mundo.
Los coches autónomos salvan millones de vidas cada año.
Resulta que los humanos son conductores terribles.
Se necesita una concentración perfecta para conducir un coche correctamente. Y eso es algo que los humanos simplemente no hacen con su capacidad de atención cada vez más deteriorada.
A nivel mundial, en 2019, 1,25 millones de personas murieron en accidentes automovilísticos. Eso es 3.287 muertes al día. Más de 20 a 50 millones más están lesionados o discapacitados.
Los humanos todavía estaban bajo la ilusión de que, como Rain Main, son muy, muy buenos conductores. Los humanos tienen la gran habilidad de engañarse de esa manera.
Desde el principio, cada accidente con un coche autónomo se convirtió en noticia. La gente enojada señaló lo peligrosos que eran y algunos gobiernos reaccionarios los prohibieron.
Esos gobiernos pagaron un alto precio al igual que los que prohibieron a Uber en favor de los taxis que todos odiaban. No puedes ponerle puertas al campo. Finalmente, el número de muertos por conductores humanos parecía absurdo al lado de países con poblaciones en rápido crecimiento de automóviles autónomos y ciudadanos de todo el mundo exigieron a sus gobiernos que revocaran las prohibiciones.
Después de una década, ningún accidente automovilístico fue noticia porque los humanos mataron a muchas más personas por su incapacidad de prestar atención perfecta a las condiciones cambiantes de las carreteras.
Para 2029, la cifra de muertos se desplomó debido a las cámaras de monitoreo avanzado que podían detectar accidentes en segundos y enviar a los paramédicos al segundo para atender a los heridos. Pero no fueron solo las cámaras. Los propios coches podrían ponerse en contacto con la red de la ciudad y decirles lo que sucedió, leer los datos de tu caja negra y señalar el control de tráfico para desviar los coches y enviar ayuda.
Para el año 2039, las cámaras se habían extendido desde las autopistas a las carreteras secundarias y llamaron a los paramédicos autónomos que corrieron a la escena con una precisión sobrehumana, los bots persiguieron a las víctimas de los marcos colapsados y las heridas de triaje con los antibióticos de última generación y el material que se expandió para llenar el Cortar y detener la sepsis en 15 segundos sin parar.
Los volantes, una vez exigidos por la ley, desaparecieron todos juntos.
El interior de los coches fue rediseñados como mini apartamentos con ruedas, con mesas y sillas uno frente al otro.
Beber y conducir se convirtió en algo bueno.
Las generaciones de personas más mayores que juraron que la gente siempre querrían sostener el volante y sentir que el camino retumbaba bajo sus pies había pasado al gran más allá. Las generaciones más jóvenes no podían entender de qué se trataba todo este alboroto cuando preferían estar charlando, trabajando o levantando los pies mientras leían un libro en sus gafas o lentes de realidad aumentada.
Para 2049 los humanos que conducían eran ilegales sin un permiso especial y casi nadie murió en la carretera.
Los coches impulsados por humanos se convirtieron en un nicho de mercado en expansión, como lo hicieron los registros después del surgimiento de los CD, Napster, Apple Music y Spotify.
Pero no estaba del todo bien.
Los coches autónomos que salvaron tantas vidas también cuestan mil millones de vidas.
La nación de la comida rápida y los vientos de la tercera guerra mundial
Los aguafiestas tenían razón.
La IA mató empleos más rápido de lo que podríamos reemplazarlos.
Ellos también estaban equivocados, pero eso llevaría tiempo y un desastre para determinar cuáles eran los derechos.
Para el año 2030, una combinación letal de autoritarismo creciente , decadencia democrática , fábricas automáticas impulsadas por impresoras moleculares y en 3D y automóviles autónomos crearon la tormenta perfecta.
La industria de la comida rápida adoptó la automatización con los brazos abiertos más rápido de lo que nadie esperaba.
3.8 millones de empleos se vaporizaron de la noche a la mañana cuando la industria de comida rápida reemplazó a las personas con máquinas.
Comenzó con los conserjes. ¿Por qué pagar un salario mínimo a alguien cuando puede gastar $ 10,000 y obtener una máquina que se limpia a la perfección, nunca se cansa, solo necesita mantenimiento una vez al año y dura cincuenta años?
Muy pronto salieron robots capaces de hacer hamburguesas, freir y todas las otras acciones relacionadas con este mundo. Las franquicias que resistieron salieron del negocio.
Los gobiernos no reaccionaron lo suficientemente rápido. Cuando intentaron aprobar leyes para mantener a las personas en el empleo, solo aceleraron el colapso ya que las cadenas de comida rápida que no podían utilizar las lagunas legales se fueron a la bancarrota.
Las personas dejaron de comprar coches cuando las empresas de la economía compartida podían entregarle uno a la mayoría de las personas en una gran ciudad en cinco segundos a un precio muy reducido.
Singapur y Suiza sufrieron como los préstamos y la inversión desaparecieron. El milagro africano que había visto a una docena de países en el enorme continente asumir el bajo costo de fabricación de productos de China se detuvo. El contagio económico se extendió rápidamente a Rusia y la UE, arrasando a Alemania, Francia e Italia antes de acabar con cadenas enteras de China y Estados Unidos.
Como ha ocurrido en otras ocasiones a lo largo de la historia, cuando las personas están sin trabajo, se enojan y se reúnen en las calles. Las colaciones se forman y los grupos extremistas se multiplican como células cancerosas. Pronto los jóvenes están luchando en las calles porque no tienen ninguna otra salida para sus energías.
A diferencia de las guerras del pasado, cuando llegó la tercera guerra mundial , ningún país del planeta se salvó.
Comenzó como una guerra cibernética que estalló rápidamente en todos los asaltos a la red eléctrica y las infraestructuras de comunicaciones, dejando a las personas en la oscuridad y aisladas del mundo.
En semanas, las superpotencias del mundo declararon la guerra abierta.
La IA jugó mil papeles diferentes en el conflicto
Las balas rara vez fallaron cuando las rondas inteligentes se curvaron en las esquinas y golpearon a los objetivos con un tiburón como el instinto asesino.
Los enjambres de micro drones acechaban ciudades, con sus pequeños ojos llenos de objetivos siempre cambiantes. Si no consiguieron a su hombre, se recargaron y salieron de nuevo sin parar cada noche hasta que finalmente encontraron su objetivo, lo golpearon como un dardo y explotaron.
Y las diferentes inteligencias artificiales dirigieron la guerra.
Al igual que AlphaGo décadas antes de dominar con facilidad a los mejores maestros de Go del mundo, las IAs secretas de computación cuántica lucharon miles de millones de batallas virtuales en una simulación perpetua, dominando formas de aplastar al enemigo, desde la guerra total hasta la guerra de guerrillas y contraataques complejos. Tácticas de insurgencia grandes y pequeñas.
Entregaron un completo análisis de la estrategia de imagen general y dirigieron las batallas mejor que cualquier general, enviando tropas para luchar y morir en las colinas y las playas. Enviaron hombres y máquinas para matar, y los generales dependían cada vez más de ellos para ganar la guerra, en lugar del instinto humano.
Las Fuerzas Especiales aterrizaron en aviones furtivos y su asistente personal de batalla coreografió cada uno de sus pasos mientras se arrastraban en las casas a cero treinta y pico, matando a objetivos de alto valor antes de que incluso se levantaran de la cama. Los soldados eran centauros , con sus mentes atadas con delicados cordones neurales , que les brindaban acceso directo a la IA en tiempo real, lo que mejoraba sus tiempos de respuesta y sus sistemas nerviosos, ya que sus músculos aumentados con nanotecnología se movían a una velocidad súper humana por las escaleras.
Pero mientras el costo humano fue alto, por cada humano que murió, murieron diez bots.
Una docena de diferentes variantes de soldados robóticos se unieron a la lucha, desde esqueletos de animales cargados con cargas pesadas, a jets autónomos , a tanques autocontrolados a soldados robóticos a escala real que lucharon y murieron, además de sus hermanos y hermanas de armas.
Al final, 10 mil millones de máquinas y 1,5 mil millones de almas murieron cuando finalmente se disparó el último disparo y el mundo dio un paso atrás para ver los horrores que había provocado.
El Fénix y Las Cenizas
Pero como todas las guerras anteriores, no fue el final de la vida como la conocemos.
La humanidad se levantó de las cenizas.
Era la guerra para terminar con todas las guerras, pero lo que siguió fue una profunda era de paz.
La gente llegó a casa y nunca más quería volver a pelear. Querían establecerse y tener hijos y pasar el tiempo riendo y bebiendo con amigos y sacudiéndose las heridas y cicatrices del pasado.
La guerra acelera la tecnología.
La Segunda Guerra Mundial comenzó con aviones, pero cinco años más tarde los motores a reacción cruzaron el cielo, no a tiempo para ganar la guerra, sino a tiempo para cambiar la forma en que la gente viajaba por el mundo después de la guerra.
Muchas de las tecnologías que proliferaron durante la Tercera Guerra Mundial, como la computación cuántica, la realidad aumentada, los libros de contabilidad digitales, las plataformas de criptografía, la comunicación cifrada con meshnet, la impresión molecular, los sistemas de pago, los algoritmos de aprendizaje universales, se invierten desde simular cerebros humanos y los diagnósticos médicos avanzados Barrido en el mundo civil.
Las IA que una vez dirigieron a los soldados de operaciones pesadamente barbudas hacia su presa, ahora conversan con los niños sobre cómo superar a los matones y hacer nuevos amigos.
Los campos de exterminio estaban cubiertos de parques .
Las IA utilizadas durante el conflicto fueron reutilizadas para administrar economías enteras, ordenando bienes y servicios antes de que la gente supiera que los querían y dirigiendo a las fábricas a acelerar o ralentizar.
Los soldados robóticos fueron desguazados o redistribuidos como policías o para plantar árboles para ayudar a que el ecosistema se recupere de los efectos devastadores de toda la guerra. Los drones se adentraron en los campos chamuscados y los cielos y plantaron rápidamente árboles, flores y alimentos, y los estimularon con luz ultravioleta y un equilibrio de pH perfecto de alimentos y nutrientes diseñados para reconstruir el suelo roto.
Las cápsulas hospitalarias automáticas y autocontenidas revolucionaron a los paramédicos y llevaron el hospital al paciente.
Y el número de muertos tenía un lado positivo.
Cuando no resolvemos nuestros problemas, la naturaleza los resuelve de la manera más brutal y fea. Con menos personas que necesitaban empleos, el mercado laboral comenzó a crecer en una era de expansión sin precedentes.
Las ventanas rotas son una falacia en la economía cotidiana. Pero a veces muchas ventanas rotas pueden reiniciar toda la economía mundial.
Tal vez el loco titán Thanos tenía razón después de todo?
De cualquier manera, la economía creció a un ritmo febril en los años 2040 y 2050.
La IA creó una explosión de nuevos puestos de trabajo como el que el mundo nunca había visto. Primero vino la destrucción, pero luego vino la creación. Los nuevos trabajos que no podíamos imaginar antes de que desaparecieran los viejos comenzaron a florecer.
Resulta que los robots de conserjería necesitaban mucho más mantenimiento de lo que pensaban sus creadores y toda una industria creada para limpiarlos y mejorarlos.
Los modificadores de automóviles y las actualizaciones posteriores al mercado de vehículos modulares surgieron en todo el mundo, creando nuevas potencias económicas.
Los psicólogos de la IA rastrearon problemas cuando los sistemas complejos se volvieron locos.
Los diseñadores genéticos, ayudados con las IA del centauro, crearon nuevos alimentos y organismos, antibióticos y medicamentos.
Una nueva generación de niños se encogió de deudas y no se molestó en ser dueño de casas, automóviles o televisores grandes. Abrazaron una economía de intercambio justo a tiempo con AIs dirigiendo muchas de sus acciones diarias de una manera que hubiera aterrorizado a la clase media suburbana de generaciones pasadas. Se movían de un lugar a otro, sus computadoras dentro de sus cabezas mientras viajaban por el mundo y trabajaban de forma remota.
Más y más personas habían crecido con IA y no pensaban en nada de mejorar su inteligencia con un cordón neural o ojos aumentados que pudieran ver con perfección sobrehumana. Las personas trabajaron lado a lado con AI, mientras que los políticos y las grandes empresas y las organizaciones autónomas descentralizadas (DAO) aprendieron cómo equilibrar las necesidades del hombre y la máquina.
El Bosque Creciendo Salvajemente
En solo cincuenta años, vimos las semillas de mostaza de los albores de la Era de la Inteligencia crecer en un bosque salvaje e incontrolado.
La humanidad sufrió, perseveró y prevaleció.
Una nueva Gran Generación se hizo más fuerte, sus mentes se expandieron con software inteligente y wetware, una generación deposhumanos tempranos que señalan el camino hacia el Homo Deus .
El poder universal de la IA reflejaba los aspectos demoníacos de la mente humana y también los mejores ángeles de nuestra naturaleza.
Nos ayudó a perder la razón y matarnos unos a otros, como nos gusta hacerlo periódicamente, y reparó esas mentes con técnicas de psicoterapia derivadas de la IA, como la electroterapia dirigida y los implantes de estimulación del centro de placer. Cuando eso no funcionó, las máquinas diseñaron píldoras felices que hacían que el Prozac del pasado pareciera Gummy Bears.
Aumentó nuestra atención médica y automatizó economías enteras.
Las carreteras fueron reparadas correctamente, seguidas por drones y cámaras que nunca dormían. Y la gente dejó de morir en esos caminos camino del trabajo.
Nuestra ropa y bolsos se despertaron. Nuestros teléfonos inteligentes se desvanecieron en nuestros collares y contactos y globos oculares aumentados.
Las mismas calles y aceras debajo de nuestros pies se hicieron inteligentes.
Y durante un tiempo las personas volvieron al equilibrio y la prosperidad en el ciclo eterno de la vida y la muerte, el auge y la quiebra, la felicidad y la tristeza.
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En el próximo artículo, iremos más allá de los próximos cincuenta años y echaremos un vistazo al mundo en quinientos años, un mundo más allá de toda imaginación.
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AI in Five, Fifty and Five Hundred Years — Part Two — Fifty Years
Check out part one of this series for what the next five to fifteen years looks like in AI. In part two we get super…hackernoon.com
